Al esperar nos volvemos impacientes.
Paradójicamente, mucha gente corre en el carro, en el transporte público para llegar a un trabajo que detesta, y del que está deseando salir corriendo cuando se acerca el fin de nuestro horario. Somos capaces de no comprar algo si hay que hacer demasiada cola y se ha demostrado tras un estudio que tras pulsar el botón del ascensor, la gente empieza a impacientarse a los 20 segundos.
Pero ¿por qué odiamos esperar? Hay una especie de sentimiento de pérdida de tiempo, de filtración de la vida por los resquicitos de las colas y los turnos. Algo que nos hace apresurarnos para hacerlo todo más rápido, tragar sin saborear, querer tener fruta de temporada todo el año y obtener los beneficios sin esfuerzo. Y de que vale eso,si al final de cuentas la vida corre y logra su meta final hayas o no hayas corrido en la vida siempre la vida va a llegar al mismo lugar, creo que es la única que tiene asegurado su éxito en estos de logar objetivos.
En los trabajo de Daniel Goleman, uno de los padres de la idea de Inteligencia Emocional, señala que uno de los secretos de la felicidad está, precisamente, en saber esperar. Es lo que se llama “demorar la recompensa” y que resume la capacidad de trabajar con la propia voluntad. Nada más filosófico que eso, porque básicamente ofrece a todos la posibilidad de modificar la forma de enfrentarse a su propia vida, de aprovechar las experiencias, no los minutos.
Y es que dejar que el tiempo cumpla su propio ciclo también es una forma de aprovechar el tiempo, de no dejar que la vida se nos escape en la prisa por vivir, porque la vida es, ante todo, tiempo que se vive, no que se pasa.
cuando se es joven hay una carrera incesante y no hay nadie que nos indique que todo puede llegar sin la necesidad de correr tanto.
Un ejemplo tal cual es cuando se esta guiando a los hijos o representados en una tarea, no veo la necesidad de agobiarlos y meterle un templon o un pellisco porque no entendió como se agarra el lápiz por ejem, o como se le hace el palito a la letra T, y al final ese mismo niño al terminar su grado quizás no consiga el cupo en la universidad pero lo agobiaron tanto apresurandolo porque a tal edad tenia que estar graduado y para que pregunto? Todo tiene su tiempo
Un día sabrás cuando abandonar las cosas que no te sirven pero sin forzar a que no te sirvan.
Un día sabrás que no pudes mirar más allá de ti si antes no has mirado dentro de tí.
Un día sabrás que saberlo todo es no entender nada.
Un día sabrás que la rosa no se esfuerza para ser rosa, y que tú, con tu esfuerzo en "ser" has dejado de ser.
Un día sabrás que ya "eras" antes de que quisieras ser.
Un día sabrás cuan limitada era tu idea de ser limitado pues tú pusiste el límite.
Un día sabrás que lo que te atormenta se hace fuerte en tu mente y lo liberas en tu corazón.
Un día, sólo o acaso cuando comprendas que todo está bien como está, que este momento es perfecto, un día...sabrás.
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